A partir del 14 de Abril del 2018 termina el plazo prorrogado por el BOE del 13 de Abril de 2013 según RD 238/2016 de modificaciones al Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios, en el que establecía un plazo de cinco años desde su entrada en vigor para la sustitución de calentadores de gas hasta 24,4 kW para producción de agua caliente sanitaria de cámara de combustión abierta y tiro natural instalados en el interior de las viviendas, hoteles rurales.., por aparatos de combustión estanca o tiro forzado.

En resumen, que a partir de la fecha indicada, en toda España no se deberá instalar o cambiar por otro existente un calentador de tiro natural en el interior de la vivienda y deberá ser estanco.

Un calentador de tiro natural es el que toma aire de la cocina para poder tener la llama que nos calienta el agua para los grifos, y los nuevos deben tomar el aire del exterior y ser estancos por lo que garantizamos que no se produzcan los revocos de humos que pueden provocar los accidentes que ocurren por inhalación de monóxido de carbono.

La ventaja de este cambio es que ganamos en seguridad y con los nuevos calentadores no hay riesgo de estos posibles accidentes.

calantador-atmosferico

Esta obligación motivará que los fabricantes reduzcan el precio del producto al tener mas demanda, como ya ocurrió con las calderas atmosféricas, que al desaparecer y aumentar la demanda de calderas de condensación, su precio se ha reducido al de las antiguas atmosféricas ganando en tecnología, eficiencia y ahorro de combustible.

Esta obligación no afecta a los aparatos instalados en una zona considerada como exterior de la vivienda o que tenga una abertura mínima de ventilación al exterior de 1,5 metros cuadrados, donde si se podran instalar o cambiar por otro igual al existente, ya que se considera zona ventilada.

La alternativa directa son los calentadores estancos como obliga la reglamentación o los siguientes:

El termo eléctrico, que no es un sistema de producción instantánea y calienta el agua mediante resistencias eléctricas, lo que implica mayor gasto  por el precio de la electricidad.

La bomba de calor, que siendo también un acumulador de agua calentado por electricidad, gracias a su tecnología mediante el uso de refrigerante, consigue un coste similar al gas, por la eficiencia que tienen los sistemas frigoríficos. Estos equipos constan de un acumulador de diferentes volúmenes, colocados en el suelo y un equipo frigorífico integrado en su parte superior, sin necesidad de unidad exterior. Por su reducida potencia, el consumo eléctrico es muy bajo, lo que le lleva a ser un sistema muy ventajoso.

Para ampliar la información, estaremos encantados de atender su solicitud.

Autor: Castillo y Ayuga