Mantenimiento del aire acondicionado
Uff que calor! y la máquina no enfría nada.
¿Has dicho esta expresión alguna vez?, si no sigues estos consejos, alguna vez lo dirás.
Hoy día todos los comerciales y la mayoría de los hogares cuentan con un sistema de generación frío mediante una máquina que impulsa aire en el interior y otra máquina que impulsa el aire hacia el exterior, junto a la interior o partida en el exterior.
Como todas las máquinas, estos aparatos no son eternos y por tanto requieren de un mantenimiento más o menos frecuente, según el uso que se les solicite o el lugar donde están instalados. No lleva el mismo mantenimiento un aparato de una vivienda o pequeña tienda de regalos que el aparato que está instalado en un bar o una tienda de ropa.
El mantenimiento del aire acondicionado consiste en la limpieza de las baterías de intercambio por donde pasa el aire para ceder calor o frío según el caso que al ir condensando por la diferencia de temperatura, está húmedo y se va acumulando las partículas de polvo hasta llegar a bloquear el paso del aire si no se limpia.
Para evitar acceder al interior de la máquina, que es donde se encuentra esta pieza, todas las máquinas cuentan con unos filtros, que son la primera protección que tiene la máquina para evitar este ensuciamiento interno. Además estos filtros, según las máquinas, pueden ser específicos para evitar olores y para ellos los fabricantes aconsejan cambiar el accesorios cada cierto tiempo, igual que en el frigorífico, por ejemplo. Como decía, estos filtro suelen ser de fibra o malla de carbono, que permite pasar el aire pero va cazando las pequeñas partículas que contiene el aire a su paso por lo que va acumulando la suciedad del ambiente, de esta manera evita que se acumulen en la batería interior.
La limpieza es tan sencilla como acceder a ellos, como indica las instrucciones de su aparato y seguir los pasos para limpiarlos, normalmente bajo el grifo, y volver a colocarlos sin más problemas.
Si por la ubicación de máquina o el acceso, no es posible hacerlo, tendrá que llamar a su instalador de confianza para que le haga esta operación, que por lo general no le supondrá un coste mayor de 50 €.
Pero si el mantenimiento no se lleva a cabo los problemas más inmediatos que puede notar son el mal olor y la falta de aire de impulsión. Pero no son los más graves porque el hecho de no hacer esta inversión le supone un mayor consumo de electricidad del equipo al no dejar pasar todo el aire que debe y a lo largo del tiempo será mucho más dinero que lo que le cuesta el aviso de su instalador.
Pero no se queda ahí el problema, sino que puede derivar en una avería importante del compresor, que es el corazón del equipo, y la reparación del mismo le puede suponer casi la mitad del coste de un aparato nuevo.
Estos problemas son importantes en cualquier caso, si nos ponemos en la piel del responsable de un restaurante que en la hora de la comida, en verano, el equipo de aire acondicionado deja de funcionar y sus clientes se quejan o se van, o una tienda de ropa llena de gente a media mañana y los probadores llenos, ¿que coste tendría para el negocio?.
Es por esto que como mínimo una vez por temporada y para profesionales, cada seis meses según la actividad, deben pensar en su aparato de aire acondicionado y prestarle la atención que merece. Confíe en profesionales acreditados y debidamente autorizados para tener la total garantía de sus trabajos.
Pueden contar con nuestra empresa que reúne todos los requisitos de autorización, profesionalidad y atención.
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